Revenge of the Fallen...

Ayer fui a ver Transformers: Revenge of the Fallen y al salir del cine, sabía que tenía que escribir esto.

La verdad es que como la primer película de Transformers de Michael Bay no me gustó, no pensaba ir a ver esta, pero de repente los compañeros de trabajo empezaron a decir que fueramos ayer que era el estreno. No me obligaron ni me presionaron para ir, solo me preguntaron si quería ir con ellos y como suelo pasármela encerrado la mayor parte del tiempo y no tenía nada en particular que hacer anoche me uní a la euforia colectiva y accedí a acompañarlos sin oponer resistencia, pensaba que si bien, no sería una gran película, por lo menos me entretendría y pasaría el rato… pero cuando estaba sentado en la sala, aun antes de que empezara la proyección ya me estaba preguntando: “¿Qué %&$! estoy haciendo aquí?”

Para los que vieron la primer película (que son la mayoría) y quieren saber que esperar de esta nueva entrega, les puedo asegurar que no se sale de los ‘cánones’ establecidos por su predecesora, pero por supuesto, llegando a un nuevo nivel. Es decir, tiene lo mismo pero en mayor cantidad, lo cual significa, que esta película es:

¡Más incoherente!
¡Mas absurda!
¡Más ridícula!
¡Más mamila!

Y claro, hay Más Transformers, muchos más, pero por supuesto, están más feos y en su mayoría son más difíciles de distinguir de los demás, sobre todo, al momento de pelear. De verdad, nunca supe quienes eran la mayoría de ellos.


Entiendo que alcanzar ese grado de complejidad en los modelos y la animación es un logro tecnológico digno de admiración, pero sinceramente, se me hace un verdadero desperdicio y eso me duele aun más. ¿Cuántas "horas hombre" se habrán requerido para… ‘eso’? Solo de pensar en todo el trabajo y dinero que implico hacer a Devastator me pone de mal humor. Y si por ahí, alguien que lee esto tiene en su mente la versión original de 6 vehículos de construcción verdes y piensa “¿Qué tiene de malo Devastator?” ¡Olvídenlo!. La versión que aparece en la película es una masa desproporcionada e incomprensible de fierros de colores carente de cualquier signo de inteligencia (ya ni para que mencionar la personalidad) que no hace realmente nada relevante en pantalla.

Y es que ¿de qué sirve ese ostentoso despliegue de gráficos cuando el contenido es completamente hueco e intrascendente?. Si de por sí en la primer película no hay mucho que permita apreciar la personalidad de cada uno de los Transformers, aquí que son muchos más robots este aspecto está aun mas descuidado. Bumblebee es rebajado a perrito faldero (de por si en la primera no estaba tan lejos…); de Starscream solo se muestra la parte cobarde y débil, pero no se muestra su ambición y el por qué a pesar de sus constantes sublevaciones Megatron lo mantiene como líder de campo de los Decepticons… y Jetfire… chale. Sin comentarios... da lástima.

Además, si bien la primera tenía ciertos momentos de humor forzado y desafortunado que por momentos hacía parecer que uno veía dos películas revueltas, esta vez descaradamente decidieron hacer una comedia tonta llena de chistes insulsamente babosos. Es decir, ahora de plano quisieron hacer una película acción-cómica, pero los chistes ni siquiera vienen al caso ni hacen reir.

En cuanto al argumento, no hay nada bueno que decir. De nuevo, todo gira alrededor del estúpido Witwicky ayudado por el soldadito ‘Boy Scout’ de la primera parte. Prácticamente nada de lo que hacen tiene sentido ni justificación y por supuesto, conforme la cinta avanza se pone peor porque la base sobre la que se construyó el guión está podrida. Lo único que hace que una incoherencia en pantalla se te olvide es que a continuación verás otra peor. Por momentos pensaba “es que si esta parte la hubieran manejado de ‘x’ manera pudo haber quedado bien” pero como todo lo que pasó anteriormente que llevó a los personajes hasta ese punto no tiene congruencia alguna, sencillamente no tiene caso que sucedan ciertas escenas... básicamente nada después de los primeros 10 minutos. Reaparecen personajes de la primer película (principalmente uno, que ni siquiera sé como se llama) de maneras completamente innecesarias e inverosímiles que luego se tornan por completo ridículas, pero ni siquiera risibles, y los dos o tres personajes nuevos no aportan nada bueno en absoluto.

¿Acaso los productores-guionistas-director piensan que la gente que va al cine es idiota?... bueno, en realidad la mayoría lo es, y se conforman y divierten con esta clase de basura, pero habemos quienes ya no estamos dispuestos a conformarnos con sus simplezas e idioteces. En serio se podría hacer una gran película de Transformers (y muchas otras cosas), hay elementos con los cuales trabajar y se podría lograr algo similar a lo que se logró con la película de X-Men (que rescata y gira muy bien alrededor de conceptos como el rechazo y la discriminación, idea esencial del concepto original del comic). Y de nuevo, sigo sin comprender ¿qué parte de “Transformers” es la que no entienden?. Eso de que “hacer una película con puros robots en donde aparezcan muy poco los humanos es mala idea” no es cierto. Tomemos como ejemplo Toy Story ¿de qué trata? ¡De juguetes! ¿y los humanos? Si, por ahí salen, y tienen que salir, pero quienes son realmente importantes son los juguetes y los humanos son personajes de apoyo ¿y hay algún problema con ello? ¡Claro que no!. Igual y podrían decir que tener en pantalla más de 100 minutos a los robots generados por computadora es muy costoso, pero no lo sería si en lugar de esas abominaciones metálicas amorfas realmente hubieran hecho diseños funcionales que no requirieran tantas horas de modelado, animación y render y por ende, no fueran tan costosos.

Y si creen que mi visión es poco objetiva, pueden consultar lo que dicen las críticas, que incluso, le dieron una calificación más baja que a la primer película.

Me arrepiento de haber ido y me siento culpable de ser cómplice de esta clase de bodrios, de haber ayudado a que este tipo de películas recauden y recuperen su inversión. Digo, nadie sabe realmente que tan buena o mala será una película sin verla, y sería injusto negarles a muchos el beneficio de la duda, pero ya tenía el antecedente de la primer cinta y alguna información respecto a esta que me indicaba hacia donde iba el asunto. Ya lo había expuesto de manera muy clara Neko con respecto a Dragon Ball y no pude menos que estar de acuerdo, y aun así fui tibio en mi actitud. A veces uno se lo toma a la ligera, como yo lo hice ayer: “Total, ¿Qué tanto son 50 pesos?, al cabo solo voy a pasar el rato”.

Tal vez algunos piensen que me lo estoy tomando muy a pecho o que estoy siendo radical (o sangrón), pero no es así. En verdad es algo muy trascendente para mí, tanto como lo pueden ser para otros los asuntos políticos o religiosos, porque es de lo que yo vivo y pretendo vivir, de producir ideas y plasmarlas a través de medios. Los comics, las películas, los videojuegos, etc. son parte fundamental de mi mundo, no solo como consumidor, sino principalmente desde la perspectiva del creador, pues aunque aún no he logrado hacer muchas de las cosas que deseo y no he llegado hasta donde quisiera, si es algo que he perseguido gran parte de mi vida y es por eso que me molesta mucho y me parece injusto e insulso que se derrochen tantos recursos en algo como esto, siendo que hay propuestas mucho mejor realizadas y diseñadas que no logran el apoyo que se merecen, por lo que considero muy importante hacerlo notar y poner lo que esté de mi parte para cambiar eso… pero ese es un problema muy complejo y un tema muy amplio que merece su propio espacio en otra ocasión.