Aun estoy procesando los resultados de la "encuesta", los iba a postear el domingo, pero resultó que la computadora que iba a usar no estaba disponible, y ayer tampoco pude porque se fue la luz… ja. Pero bueno... El caso es que mientras termino con esto, les dejo un 'pequeño' texto introductorio que había escrito para acompañar los resultados.
No recuerdo con exactitud cómo surgió la idea, creo que fue una pregunta que surgió por casualidad en una conversación y después se me ocurrió preguntar a más personas. Pensé hacer la pregunta más amplia preguntando "¿Qué tipo de criminal serías?" pero no tuvo el éxito esperado, así que reformulé la pregunta.
Menciono esto porque lo que me motivo a indagar en esto fue lo interesante que es excavar un poco y conocer esta parte de la naturaleza humana, un tema que por la fuerte implicación social que tiene, está prácticamente vetado. Quería no solo las respuestas, sino conocer las reacciones a este tipo de preguntas. Como la idea surgió informalmente, se fue concretando de manera gradual, y empecé a recopilar información antes de definir del todo las preguntas (originalmente solo era esa, pero alguien me preguntó que cuantas eran) o a quien le preguntaría, de modo que no puedo decir que tenga ningún rigor científico.
Una vez que tuve el cuestionario definido, decidí que fuera algo espontaneo, es decir, ya que tenía la pregunta en un lugar visible, simplemente esperaría a que el que así lo deseara me contestara y luego yo ahondaría de ser necesario, de esta manera, no sería forzado, y las respuestas serían más completas y confiables... y también era interesante ver quienes tomaban la iniciativa de contestar.
No recibí demasiadas respuestas, pero si suficientes. La mayoría, eran personas cercanas, que seguramente tenían la confianza de contestar y sabían que no había un juicio implícito en las preguntas, es decir, el que alguien haya contestado no necesariamente significa que será más propenso a matar (¿...o si? :P).
Intenté no dar mucha información al preguntar, para saber qué es lo que cada quien sabía, entendía y lo que a cada quien se le venía a la mente cuando leía 'asesino' o 'tipo de asesino', y procuraba que ahondaran en sus respuestas para comprenderlas mejor, pero sin forzarlo. De hecho, en la mayoría de los casos, al hacer la primer pregunta contestaban parcialmente las demás. Por lo tanto, más que encuesta, fueron una serie de entrevistas informales. Me pareció, además, muy interesante notar el vocabulario y el tono en el que cada quien expresaba sus respuestas. Sería interesante publicar las conversaciones completas, pero por tiempo y practicidad solo pondré el resumen, y no publicaré nombres.
Un concepto psicológico (planteado originalmente por Freud en su teoría de psicoanálisis y que, como casi todo lo que el postulo, no carece de detractores) es el de la represión, principalmente la parte que dice que para vivir en sociedad, todos tenemos que reprimir algunos de nuestros deseos, lo cual no es más que una forma menos elegante de decir que "La libertad de un individuo termina donde comienza el derecho del otro". Por eso es que en todas las sociedades hay leyes y normas de convivencia, y aun y cuando no esté alguien siempre vigilándolos y diciéndonos que hacer y que no, cada quien aprende a ponerse límites o imponerse restricciones no solo para evitar ser sancionado por una autoridad dentro del sistema de gobierno, sino también sino para poder encajar y ser aceptado por un grupo religioso, una familia, un grupo de amigos, etc. En fin, toda una amplia gama de situaciones en las que por diversas razones, frenamos nuestros deseos e impulsos. Por ejemplo:
- Mi jefe dice algo que me molesta mucho pero me aguanto las ganas de golpearlo para que no me corran.
- Estoy en una tienda y veo un disco que me gusta mucho pero no puedo pagarlo y aun así no lo robo para evitar ir a la cárcel o evitar la vergüenza de la situación.
- Voy en el camión de regreso a la casa y me muero de hambre, pero me la aguanto en lugar de arrebatarle al niño de al lado su bolsa de papás.
- Me gusta la novia de mi amigo, pero no intento bajársela porque eso sería muy desleal.
- Quiero salir a jugar con mis amigos, pero mi mamá no me deja porque ya es tarde.
- Un alumno me ofrece una lana para no reprobarlo, con ese dinero me podría ir a pasear el fin de semana pero prefiero no aceptar porque eso dañaría mi reputación.
- Tengo calor, pero no me quito los zapatos y la camisa porque ¡¿Qué van a decir?!
Lo curioso es que en nuestra sociedad “civilizada”, tan solo mencionar la palabra ‘matar’ puede ser mal visto, a pesar de que es parte inevitable de nuestra naturaleza, pues necesitamos alimentarnos de otros seres vivos para sobrevivir. Algunos dirán que es muy diferente matar a un humano que a un animal o una planta, pero en el fondo la única diferencia real es que lo que comemos no es humano, pues el instinto de conservación de la especie nos dicta ver como algo aborrecible el matar a un congénere (o peor aún, comerlo). Además, esta brecha se ha ampliado porque en nuestros tiempos estamos acostumbrados a que alguien más ‘mate’ nuestra comida por nosotros, de forma que vemos la muerte como algo completamente distante, ajeno e indeseable, o al menos, algo con lo que no estamos acostumbrados a convivir.
Pero bueno, volviendo al tema y tomando en cuenta lo de la represión y todas esas mariguanadas, podríamos decir que preguntar "¿Cómo matarías? ¿A quién?" puede ser una forma indirecta de preguntar ¿Qué te frustra? ¿De qué te quisieras deshacer? ¿Qué quisieras tener?, o incluso ¿Que no te atreves a admitir?... y es que no siempre es así de fácil y directo y no todos sueltan prenda tan fácil… pero no deja de ser interesante analizar las respuestas y reacciones en busca de esta clase de información. Y aunque se entiende que eso de las fantasías criminales y homicidas no es nada del otro mundo, tampoco significa forzosamente que siempre vamos a ver reflejadas estas frustraciones y deseos en las respuestas. ¿Por qué unos tienen fantasías más detalladas que otros?, ¿Qué pasa los que contestan que no matarían por ningún motivo o dicen no sentir estos deseos?, ¿Y con los que no lo han pensado y no saben qué tipo de asesino serían o como matarían?, ¿Qué hacen con la frustración?, ¿Hacia dónde se va?, ¿Es acaso tan solo que no todos sufrimos el mismo grado de frustración o también es que no a todos nos pega igual ni la expresamos del mismo modo?, ¿Hay algo mal entre quienes la resienten más? ¿O será entre quienes la resienten menos?. Como regularmente pasa, lo más probable es que haya todo tipo de casos y por lo tanto, no habrá respuestas únicas para ninguna de las preguntas.
2 comentarios:
Retomando la teoría de la represión, es interesante ver cómo hay personas que son extremadamente sádicas y violentas, pero jamás tocaron un Grand Theft Auto ni vieron Kill Bill... Irónicamente el estereotipo de "asesino potencial" ¡es exactamente lo contrario! a mi me da más miedo la señora fanática que se la pasa rezando y condenando a todo el mundo (la mamá de Carrie, por ejemplo :P) que un friki cualquiera. No olvidemos a quienes matan por su FE o las malogradas, ridículas y totalmente gratuitas historias de "Mujeres Asesinas", que ya serían ejemplos de asesinos circunstanciales que se convierten en tales debido a la liberación repentina de alguna represión.
Pues si, es que las fantasías sádicas u homicidas pueden funcionar como una válvula de escape, en cambio, cuando ni siquiera eso nos permitimos o no aceptamos esa parte podemos convertirnos en una bomba de tiempo. A mi también me dan mas miedo las personas que parecen 'demasiado normales'.
Y bueno, yo si creo que los juegos o el cine pueden influir en la conducta... pero haber experimentado violencia o cualquier tipo de abuso definitivamente tiene que ser un factor de mucho más peso.
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